¿Para qué sirve la espironolactona y cómo la uso?

La espironolactona tiene una función diurética antihipertensiva y ahorradora de potasio. Sus principales indicaciones son:

  • Hipertensión esencial (elevación de la presión sanguínea sin causa definida),
  • Edema (hinchazón) o ascitis (acumulación de líquido en el abdomen) debido a una insuficiencia cardíaca, cirrosis del hígado y/o síndrome nefrótico,
  • Edema idiopático (edema sin causa iluminada),
  • Tratamiento de la hipertensión maligna (un tipo grave de hipertensión),
  • Prevención de la hipopotasemia (reducción de los niveles de potasio en la sangre) y la hipomagnesemia (reducción de los niveles de magnesio en la sangre) en las personas que toman diuréticos o cuando otros tratamientos son inadecuados o inapropiados.

Además, se puede prescribir para el diagnóstico y el tratamiento del hiperaldosteronismo primario (aumento de los niveles sanguíneos de una hormona renal llamada aldosterona) y el tratamiento preoperatorio del hiperaldosteronismo primario.

¿Cómo se usa la espironolactona?

La espironolactona tiene como presentaciones: tabletas de 25 mg, 50 mg y 100 mg.

La dosis a utilizar depende de la indicación del medicamento.

La dosis diaria total puede hacerse en una sola dosis, o fraccionada durante el día.

Es importante que la medicación se administre diariamente a las mismas horas y que el tratamiento no se interrumpa sin asesoramiento médico.

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Contraindicaciones de la espironolactona

La espironolactona está contraindicada en casos de:

  • Alergia a la espironolactona o a los otros componentes de la fórmula;
  • Mujeres embarazadas o lactantes;
  • Personas que presentan una reducción significativa de la función renal;
  • Portadores de insuficiencia renal aguda;
  • Personas que presentan anuria (reducción o ausencia de orina);
  • Los portadores de la enfermedad de Addison (un desorden hormonal);
  • Las personas que tienen hipercalcemia (aumento del calcio en la sangre).

Efectos secundarios de la espironolactona

El uso de espironolactona puede causar:

  • Náuseas;
  • Malestar;
  • Dolor de cabeza;
  • mareos;
  • Prurito (picor);
  • Urticaria (alergia de la piel);
  • Confusión mental;
  • La somnolencia;
  • Fiebre;
  • Alteración de la libido;
  • Impotencia;
  • Trastornos menstruales;
  • Calambres;
  • Alopecia (pérdida de cabello);
  • Hipertricosis (crecimiento anormal del cabello);
  • Dolor o nódulos en los pechos;
  • Leucopenia (reducción de la cantidad de glóbulos blancos);
  • Trombocitopenia (disminución del recuento de plaquetas en la sangre);
  • Anomalías en la función hepática (función del hígado);
  • Fallo renal agudo.

Cualquiera de estas reacciones debe ser reportada al médico.

Al comenzar a utilizar cualquier medicamento, siga las pautas estrictamente para lograr los resultados esperados y evitar los efectos secundarios

Si tiene alguna pregunta, por favor contacte con su médico de cabecera.

 

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